tomo uno
lo froto contra un lado de la caja
observo
como la enardecida cabeza del mismo
desprende aquella furiosa llamarada
que lo ilumina todo
por un segundo
puedo verlo todo
a mi alrededor
la obscuridad cede
frente a la lumbre
pero
...
luego de aquel instante
la llama comienza a atenuarse
dejando tras de sí solo un trozo ínfimo
de carbón
habiéndome encandilado
...
...si prendo otro
quizá a mi alrededor
ya no pueda ver
absolutamente nada...